Cómo evitar que mi perro ladre

No hay nada tan molesto en un vecindario tranquilo como un perro que ladra todo el día.

Siempre hay una razón por la que un perro seguirá ladrando y, en la mayoría de los casos, está relacionado con el aburrimiento. 

Alternativamente, el perro podría estar hambriento y deseoso de comida o agua, o posiblemente no tenga suficiente refugio de los elementos, ya sea en un clima cálido o frío.

Si se pueden resolver estos problemas, esto podría ser todo lo que se necesita para evitar que el perro ladre todo el día.

Debe conocer otros factores, y es conveniente asegurarse de que se satisfagan las necesidades de su perro.

Los juguetes pueden ayudar a aliviar el aburrimiento y el ejercicio antes de períodos prolongados en los que el perro se queda solo puede ayudar a calmar al perro, ya que es más probable que duerma mientras está fuera.

La mayoría de las veces el problema radica en la falta de entrenamiento, ya que al perro no se le ha enseñado a permanecer en silencio.

El entrenamiento correcto no solo asegurará que tenga una mascota más feliz, sino que los vecinos también estarán felices de que su perro contento sea un perro tranquilo que solo ladrará cuando lo permita o cuando haya una emergencia.

Tu perro necesita saber que no será recompensado simplemente por llamar la atención y cuando se da cuenta de que recibirá suficiente atención sin la necesidad de ladrar, habrá resuelto su problema de ladridos.

La mayoría de las personas desconoce que su perro puede estar ladrando todo el día, ya que están ausentes en el trabajo y no pueden escuchar el ruido.

En esas situaciones, un chat amigable en el vecindario podría revelar exactamente cómo es tu querido perro mientras estás lejos.

Si su perro comienza a ladrar tan pronto como salga de la propiedad, puede acercarse sigilosamente, asegurándose de que no lo huela acercándose de sotavento, y luego sorprenderlo y reprenderlo por ladrar.

Entonces no sabrá si volverá en cualquier otro momento y será menos probable que continúe ladrando sabiendo que recibirá una reprimenda.